María Augusta de Wettin. Nació el 21 de junio de 1782 en Dresden, Sajonia, Alemania. Hija única del Rey Federico Augusto de Sajonia y de Amalia de Zweibrücken-Birkenfeld. María fue la primera princesa real del Reino de Sajonia, logrando dicho título en 1805, cuando su padre, siendo el Príncipe Elector de Sajonia, se convirtió en el primer Rey de Sajonia. Su vida coincidió con un período de grandes conflictos en Europa. Primero la Revolución Francesa, luego la invasión del Reino por parte de Napoleón Bonaparte, con el cual su padre se alió para conservar su propia Corona. A la muerte de su padre en 1827, la Princesa no pudo acceder al trono de Sajonia, debido a la existencia de la ley sálica que sólo permitía el acceso a los descendientes masculinos. El apoyo que su padre le brindó a los franceses produjo el descontento de Rusia y Prusia. Su tío Antonio sucedió a su padre como Rey de Sajonia. María permaneció soltera durante toda su vida. Su padre trató de casarla con un Hohenzollern de Prusia y con el nieto de Catalina II de Rusia, el Gran Príncipe Constantino Pavlovich Romanov, sin embargo ningún Reino quizo favorecer con dicho matrimonio a Sajonia, ni a las pretenciones de Federico Augusto sobre el trono de Polonia. Murió el 14 de marzo de 1863 en Dresden, Sajonia, a los 80 años de edad.
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